Hace unos días oí a uno de nuestros jóvenes preguntar si Dios aún habla por medio de sueños, personalmente creo que Él ya nos dijo todo lo que ocupamos saber por medio de su palabra.
Pero a la vez creo que sí nos habla por medio de otro tipo de sueños; los anhelos, los llamados, las metas, sin embargo estoy convencido de que si no nos esforzamos al máximo esos sueños se convertirán en castillos de arena en el aire.
Es acá donde me salta la pregunta ¿qué pasaría si, los jóvenes buscan convicciones y principios que los ayuden a tener una identidad y a no convertirse en trotamundos, que busquen en la Biblia el modelo que Dios quiere que sigan y que lo defiendan con orgullo y pasión?
¿Qué pasaría si, dejamos de pensar en nuestras limitaciones a la hora de planear nuestra vida y más bien vamos más allá pensando en, hasta dónde llegaríamos por medio de la ayuda de Dios y su poder infinito?
¿Qué pasaría si, cada acción, cada palabra que sale de nuestra boca y cada decisión de nuestra vida fuera acompañada de la frase ¨¿qué pasaría si…¨ creo que nos retaríamos, nos cuestionaríamos, nos obligaríamos a pensar, a no aceptar paradigmas, a hacer cosas nuevas.
Hablo a los jóvenes porque uno es tan joven como se siente, Dios nos dice pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán (Isaías 40:31), desafortunadamente así como hay viejos jóvenes, hay jóvenes muertos en vida, piense desde ya en su epitafio “Aquí yace Juan, aquí yace María, desde muy jóvenes hicieron lo que otros le dijeron” o “Muerto a los 15, enterrado a los 70” o quiere “Perdonado! Antes un pecador mediocre y por gracia transformado en un hombre de Dios” usted escoge, pero debe hacerlo ya! Este es el momento, este es el lugar y usted es la persona.
Hacer las mismas cosas una y otra vez esperando resultados diferentes es una locura, les adjunto un video para que vean cómo goza el diablo cuando ve a un hijo de Dios por debajo de su nivel.
Chao, un abrazo.